domingo, 29 de julio de 2018

El cielo no es el límite

Que no te digan que el cielo es el límite,
cuando hay huellas en la luna.
 

A fines de la década de 1950, el propietario de una pequeña cadena de ramos generales en el sur de Estados Unidos, se dio cuenta de que no podía conservar en inventario los aros de hula-hula. Esta manía se propagaba por todo el país con rapidez, y ni siquiera el fabricante podía suplir la demanda.

-Lo lamentamos- le dijo el fabricante al dueño de los negocios-. Este producto se ha convertido en una manía nacional, y no podemos fabricarlo con la rapidez que necesita. Me temo que deberá esperar bastante para recibir más aros de hula-hula.

El dueño podría haber dicho a sus gerentes que se disculparán con los clientes, y explicarles luego que el juego tan popular simplemente no estaba disponible. En vez de hacer eso, este señor ordenó algunos tubos plásticos y comenzó a fabricar sus propios aros, ¡con un asombroso ritmo de producción de tres mil por noche!

Este ingenioso propietario con mucha iniciativa, trajo el mismo sentido de creatividad y una actitud de "yo puedo hacerlo" a todo lo que hizo. Estaba dispuesto a atravesar cualquier obstáculo para satisfacer a sus clientes. Su cadena de negocios creció y obtuvo gran renombre y el hombre se volvió multimillonario.

¿Su nombre? Sam Walton (fundador de Wal-Mart).



Proverbios 24:10
Si fueres flojo en el día de trabajo, tu fuerza será reducida.

Fuente: Renuevo de Plenitud. Costa Rica

No hay comentarios:

Publicar un comentario